El Programa Amar es Servir (AES) de la Escuela de Educadores y Directivos de la REI cerró su ciclo 2024 con la etapa París, experiencia a la que asistieron 12 educadores de colegios y escuelas de nuestra red entre el 07 y el 11 de octubre, en la Casa de Retiros de Calera de Tango.
En esta ocasión, sus participantes fueron acompañados por Carola Puga, Susanne Karow y Cristián Rodríguez S.J.
París es la tercera etapa del Programa Amar es Servir y en ella se comparte sobre el fundamento y el modo que posteriormente se desplegará en lo que actualmente se conoce en los colegios de la Compañía de Jesús. Esto, entendiendo que la antropología ignaciana tiene mucho que aportar a la integración de fe y ciencia, entregar los principios y fundamentos para que ambos elementos puedan estar integrados con el fin de ayudar en la construcción y buscar la edificación de los estudiantes.
Durante este 2024, la experiencia París fue antecedida por cuatro etapas Loyola, efectuadas entre marzo y junio, y por dos Manresa, llevadas a cabo en agosto.
Elías Tapia, profesor del Colegio San Luis de Antofagasta que vivió la etapa París, considera que fue enriquecedora y transformadora. “Durante esa semana, pudimos profundizar en los valores y principios de la educación ignaciana, permitiéndonos reflexionar sobre nuestra labor educativa en un contexto global y de comunidad. Fue una oportunidad para fortalecer nuestro sentido de misión y compromiso, además de enriquecernos personal y profesionalmente” comenta.
Sobre los principales aprendizajes adquiridos en la experiencia señala que valora haber podido comprender la importancia de la formación integral del ser humano, tal como lo promueve la educación ignaciana. “Reflexioné sobre el valor de acompañar a nuestros estudiantes no solo en lo académico, sino también en lo personal, fomentando en ellos el discernimiento, la justicia y el servicio a los demás. Este enfoque es fundamental para formar personas conscientes y comprometidas con su entorno y su comunidad”, indica.
Finalmente, asevera que la instancia contribuyó de manera significativa a su rol como educador ignaciano, ya que le recordó la importancia de la pedagogía ignaciana en la enseñanza, reafirmando el valor del «Magis», es decir, buscar siempre hacer más por nuestros estudiantes.
Cabe recordar que el Programa Amar es Servir está dirigido a educadores/as de todos los colegios y escuelas de nuestra red y se desarrolla en diversas etapas a lo largo de la carrera del educador.