«María, ponme con tu hijo» es el lema con que el Colegio San Luis Beltrán ha querido celebrar el Mes de María. Su intención: pedir a la virgen que ponga a su comunidad con Jesús en este tiempo difícil y de incertidumbre, pensando que en su peregrinar ella tuvo que enfrentar situaciones similares a las que vivimos actualmente.
Según cuenta Marcela Pérez, Coordinadora de Pastoral de II y III Ciclo del Colegio, la idea de conmemorar este tiempo, a pesar de la distancia, surgió luego de que, como equipo, se reunieran a pensar cómo hacerlo en este contexto distinto, con tantas circunstancias difíciles. «Queremos invitar a mirar a María como una buena noticia, llegando a cada familia y a la comunidad en general de forma cercana y cálida, y que eso hable de lo que ella nos regala y muestra: cercanía y presencia», comenta.
Así, pensaron que una buena manera era hacer llegar a las familias videos donde los miembros de la comunidad compartieran una reflexión sobre la figura de María desde su experiencia y desde distintas perspectivas que hoy son claves para vivir este tiempo: María como madre y lo que ha significado ser mamá este año; como amiga, que ha caminado con nosotros en estos meses; como mujer y todo lo que eso conlleva; como persona atenta a la realidad, y una serie de otros rasgos.
De esa forma, todos los lunes y jueves de este mes, han estado compartiendo con las familias y toda la comunidad estos videos breves y sencillos, invitándolos a verlos y luego hacer una oración especial y algún gesto como prender una vela, escuchar una canción, etc.
«No estamos rezando el Mes de María tradicional; este año ha estado saturado de medios de comunicación, de pautas que leer, textos y muchas cosas entonces la idea es que los videos los puedan ver solos, las mamás o papás en el trabajo o los estudiantes en las casas sin que eso significara reunirlos a todos a cierta hora. Cada envío ha sido muy bonito y significativo», agrega Marcela, quien finaliza invitando a toda la comunidad a vivir este tiempo «dejando que María nos muestre el abrazo cariñoso y consolador de Jesús».